*Foto: Chevrolet Aveo HB5 2011*
La mayoría de los motores de combustión interna en los coches, ya sean de cuatro, seis u ocho cilindros, operan en una secuencia de cuatro tiempos llamado el ciclo Otto.Las cuatro secuencias son: Tiempo de admisión, compresión, combustión y de escape. Para exponerlo en términos simples.
Cada uno de los pistones de los vehículos se mueve hacia arriba y abajo dentro de un cilindro.
Según el pistón se mueve al fondo del cilindro, una mezcla de combustible y aire fluye hacía adentro.
El pistón entonces se mueve hacía arriba, en dirección a la parte superior del cilindro, comprimiendo la mezcla de aire y combustible según lo hace.
Justamente al llegar el pistón a la parte de arriba, una chispa del cilindro hace ignición.
Esta chispa crea una pequeña y controlada explosión que fuerza al pistón a ir a la parte de abajo del cilindro.
En el último tiempo del ciclo, el pistón se mueve hacia arriba para empujar la gasolina de escape fuera del cilindro.
Una vez que toda la gasolina ha sido expulsada, el ciclo comienza de nuevo. Mientras que este proceso trabaje como se acaba de describir, el motor funcionará correctamente y sin problemas.
Sin embargo, en ocasiones la presión del propio pistón puede causar que la mezcla de la gasolina y aire haga ignición prematuramente durante el ciclo de compresión, creando una explosión menos potente.
Esto se llama preignición y es causa de ese sonido errático que algunas veces escuchamos bajo el capó.
Esto significa que el motor no está funcionando tan eficientemente como debería, y si no se hace nada al respecto, a la larga podría perjudicar el motor.
Este funcionamiento puede influir en el rendimiento del coche también, por lo que definitivamente debemos evitar que esto ocurra.
¿Cómo hacerlo? Bueno, gasolina de un bajo octanaje es más probable de encenderse bajo la presión del pistón por si solo, por lo que es más probable de producir este efecto no deseado.
¿Significa esto que se debería usar siempre gasolina de un alto octanaje? No necesariamente. Realmente depende de la tasa de compresión del motor.
Este es el promedio del volumen dentro del cilindro cuando el pistón está en su punto más bajo con respecto al volumen dentro del cilindro y su posición más alta.
Cuanto más alta sea la tasa de compresión, más comprimida está la mezcla de aire y combustible, y más probable será que se encienda antes de lo que se supone por la presión.
Los coches con una tasa de compresión baja no necesitan gasolina premium porque no hay mucho riesgo de que la mezcla haga ignición de una forma inapropiada.
Pero los motores de alto rendimiento, los cuales tienen una tasa de compresión alta, están más predispuestos a la preignición y pueden realmente beneficiarse de la gasolina premium.
Sitio Web/Fuente: www.marcadecoches.com