Lubricantes

Marcas de autos
Lubricantes: Lo esencial para entender su importancia
Los lubricantes son clave para el buen funcionamiento de un auto. A continuación despejamos dudas en torno a estos misteriosos fluidos que ayudan a mejorar y alargar la vida del vehículo y su motor.

Seamos sinceros, nadie le da mucha importancia a la lubricación del motor de nuestro auto. Ok, sabemos que de cuando en cuando hay que cambiarle el aceite, pero poco más. Más encima, estos fluidos melosos vienen envueltos de nomenclaturas misteriosas que no muchos entienden.

Y resulta que el aceite de un motor es un ingrediente fundamental para el buen funcionamiento del auto.

¿Qué es un lubricante?
El lubricante es una mezcla de aceite base más aditivos que mejoran sus cualidades y prestaciones. Su función radica en reducir la fricción entre dos superficies metálicas y proteger los órganos mecánicos del desgaste y la corrosión ayudando también a su limpieza y refrigeración.

Asimismo, permite una mayor vida útil de los componentes lubricados, ya que en el motor forma un sello viscoso entre los anillos del pistón y el cilindro evitando pérdida de la potencia producida en la cámara de combustión.

¿Qué efecto tiene en el funcionamiento del auto?
Cambio de aceite
Existe una relación directa entre el desempeño y rendimiento de un auto con el lubricante que esté usando, puesto que para tener un desempeño y rendimiento óptimo se debe elegir el lubricante más adecuado para cada tipo de vehículo de acuerdo, sobre todo, con las especificaciones definidas por el fabricante y tomando en cuenta las condiciones de operación del vehículo.

Al elegir el producto errado se puede generar -en el largo plazo- un aumento en el consumo de combustible y además un desgaste acelerado del motor, lo que puede llegar a producir una pérdida de potencia.

En el corto plazo, al elegir un lubricante adecuado se sentirá mayor suavidad durante la conducción y eso redundará en mejores resultados de potencia.

¿Cómo elegir el lubricante correcto para mi auto?
Para elegir de buena forma se deben tener en cuenta el grado SAE (Sociedad de Ingenieros Automotrices) que se relaciona con la viscosidad del producto y el nivel de calidad API (Instituto Americano del Petróleo) de aceite, que tiene que ver con las características del lubricante.

En términos generales debe responder a las recomendaciones que realiza el fabricante de cada vehículo. Con base en esta información se debe determinar dentro de las opciones disponibles en el mercado, la que resulta más óptima para el funcionamiento del motor.

En este sentido, se deben tener en cuenta factores como la edad, estado, uso que se le da al vehículo y tipo de motor del automóvil.

¿Qué es un aceite mineral?
Fotos de autos: Honda Civic
Existen en el mercado tres tipos de aceites. El primero de ellos es el mineral, que está formado por una base obtenida directamente de la destilación del petróleo, a lo que se suman una serie de aditivos que le confieren propiedades que aportan a la mejoría de sus prestaciones.

Los aceites minerales ofrecen buenas prestaciones, sin embargo si se los compara con los aceites sintéticos aparecerán algunas limitaciones, las que radican en su funcionamiento a bajas temperaturas, menor capacidad al arranque y reducida capacidad en la lubricación.

¿Qué es un aceite sintético?
Los lubricantes sintéticos son una sustancia creada a medida en laboratorio a partir de una base mineral, con lo que se obtiene un producto de mayor calidad y rendimiento.

Al ser elaborados químicamente, ofrecen excelentes propiedades lubricantes tanto a altas como a bajas temperaturas incluyendo una mayor protección del motor en estas condiciones, mejor control de consumo de aceite y fácil arranque en frío.

En tanto, también existen los lubricantes semi-sintéticos formados por una mezcla de aceites base de los dos tipos anteriores.

¿Cada cuánto tiempo hay que cambiar el aceite?
El intervalo entre dos cambios de aceite se determina por el fabricante en función de las prestaciones técnicas del lubricante y de las características del motor, sin embargo, generalmente se realiza en función de dos parámetros: el kilometraje y el tiempo de uso.

No obstante, en ciertas condiciones de uso, como pueden ser la conducción urbana con frecuentes arranques y paradas, es importante reducir el intervalo entre cambios de aceite.

¿Cómo se deben hacer los rellenos de aceite?
Idealmente se debe realizar con el mismo lubricante que se utilizó en primer lugar, pero si ante una necesidad urgente o error se utiliza otro tipo de producto nada grave sucederá, ya que los aceites de distinto tipo no se cortan al mezclarse ni producen ninguna reacción química contraproducente.

Sí se producirá una baja en el rendimiento del funcionamiento del lubricante de mayor calidad utilizado.

En el cambio de aceite es importante utilizar el filtro adecuado, en este sentido lo más recomendable es usar productos sintéticos de manera continua en todo tipo de vehículo, pero sobre todo en aquellos de modelo reciente.

¿Cuáles son los mitos más comunes sobre lubricación?
Mi auto no gasta aceite
Todos los automóviles consumen aceite... con mayor o menor rapidez.

Como todo derivado del petróleo, el aceite lubricante es combustible. Se va quemando gradualmente en la cámara de combustión.

Este proceso es más rápido en los vehículos de mayor antigüedad. En general, el consumo de aceite depende del año de fabricación y del tipo de vehículo. Cuando las piezas están ya desgastadas, el combustible puede filtrarse hacia el cárter y mezclarse con el lubricante.

Así, el combustible ocupa el lugar del aceite que se ha quemado y el nivel no baja, haciéndole creer que su automóvil no gasta aceite. La conducción a velocidades altas también aumenta el consumo de aceite.

Un aceite grueso, con más cuerpo, lubrica mejor

Un aceite muy grueso, con mucho cuerpo, no es necesariamente mejor.

El lubricante adecuado para cada vehículo es aquel que cumple con las normas de viscosidad y calidad recomendadas por el fabricante.

Antes se requerían aceites espesos porque las piezas de los motores no eran diseñadas con mucha precisión y no ajustaban bien entre ellas. Hoy, los avances tecnológicos hacen posible fabricar piezas con alta precisión; su ajuste casi perfecto favorece el uso de aceites más delgados (menos viscosos).

Cuando se mezclan aceites diferentes, se cortan

Los aceites de marcas o tipos diferentes no se cortan al mezclarse.

Al mezclar aceites de diferentes marcas o viscosidades no se produce ninguna reacción química contradictoria. Si el aceite aparece cortado en la varilla, es porque se está filtrando agua al cárter.

En invierno, la humedad del aire se condensa en contacto con las paredes frías del cárter. Estas gotas de agua se suman a otras, que pueden pasar al interior del cárter a través de empaquetaduras defectuosas, y se mezclan con el aceite formando una emulsión.

Si el aceite se ve lechoso, es porque hay mucha filtración de agua, lo que es grave. En este caso, hay que hacer un cambio de aceite de inmediato, con una revisión mecánica.

Agregar aditivos mejora el rendimiento del aceite

Un buen lubricante trae todo lo que se necesita en su propio envase.

El aceite ya contiene todos los aditivos necesarios para su óptimo rendimiento. Los fabricantes de automóviles no recomiendan agregar aditivos a los lubricantes.

Un buen lubricante está elaborado con fórmulas de probada eficiencia y se ha demostrado que ciertos aditivos complementarios pueden alterar significativamente sus propiedades, perjudicándolas.

Por el contrario, no existe prueba de laboratorio efectuada por organismo reconocido que muestre una mejora de rendimiento con el agregado de aditivos (para aceites de buena calidad).

Elegir el lubricante preciso es el mejor favor que se le puede hacer a un vehículo.
· Se facilita el arranque
· Se ahorra combustible
· Se evita la pérdida de potencia
· Se reduce el consumo de aceite por kilómetro
· Todas las piezas del motor se mantienen limpias, trabajan mejor y sufren menos desgaste
· Se prolonga la vida útil del motor
· Se ahorra dinero en el mantenimiento del vehículo

¿Cómo se que el aceite ya no sirve?
Mire, huela y palpe. La vista, el olfato y el tacto permiten reconocer fácilmente un aceite que ya no sirve.

Si se ve lechoso en la varilla, está contaminado con agua.

Si tiene olor a gasolina, está contaminado con combustible. Si se detectan partículas al tacto, está contaminado con desechos sólidos.

Un color atípico (muy negro o rojizo) es también un claro indicio de que el aceite debe cambiarse.

¿Cuáles son los beneficios más usuales de un aceite sintético?
En un aceite sintético, todas las propiedades que puede tener un buen lubricante están perfeccionadas. Como su fórmula se controla en laboratorios de alta tecnología, es más estable, contiene la proporción justa de aditivos y sus efectos se prolongan en el tiempo.

El aceite sintético está "hecho a la medida" de las necesidades de los motores actuales y ofrece el máximo de beneficios en términos de rendimiento.

Los lubricantes son también confiables para soportar piezas mecánicas selladas y minimizar la contaminación externa y la pérdida de fluidos. Además los lubricantes sirven para absorver los golpes de los movimientos de las piezas mecánicas.

Una película lubricante puede absorver y disipar los picos de energía sobre un área de contacto amplia. También puede transferir energía actuando como medio para ello, en el caso de equipo hidráulico o para elevación en maquinaria de automoción.

Los lubricantes previenen la corrosión o minimizar el componente de corrosión en un sistema mecánico. Eso puede ser alcanzado tanto por neutralización química de los productos corrosivos o por establecer una barrera entre componentes y el material corrosivo.

La composición de los lubricantes está dada por dos tipos de materiales. El primero es una base de fluido que compone del 75 al 95% del producto. La más usada hoy deriva del petróleo crudo. Se lo identifica como aceite mineral o sintético.

A la base se le adicionan componentes químicos que mejoran e imparten nuevas propiedades al aceite mineral. Estos componentes son conocidos usualmente como aditivos.

El uso de componentes químicos especiales se aplica a reducir la fricción y el desgaste.

El principal rol de estos componentes es ofrecer protección cuando el fluido lubricante no logra mantener la separación entre piezas expuestas a la fricción. La evolución continúa y a medida que el tiempo pasa, se requieren nuevas necesidades de los lubricantes por el cambio tecnológico en los equipos.

A medida que los equipos son más sofisticados, la demanda de lubricantes se hace mucho más exigente. El que fue un lubricante aceptable en el pasado y resultaba ser el preferido, bien podría ser hoy completamente inaceptable.

La industria automotriz es un ejemplo excelente de como ha cambiado la demanda sobre equipamiento. Los motores usados hoy en los coches requieren muchísimo más de los aceites que lo necesario unos pocos años atrás.

Para el mejor aprovechamiento de los combustibles, la mayoría de los autos están usando ahora aceites livianos. Ahora los mismos autos tienen motores que desarrollan más potencia por centímetro cúbico de desplazamiento que cualquiera de los fabricados antes.

Clasificacion de los Tipos de Aceite para Motor
Clasificación por tipo de servicio
Los aceites de motor son clasificados por el Instituto Americano del Petróleo (API) para definir el tipo del servicio para el que son aptos. Esta clasificación aparece en el envase de todos los aceites y consta de 2 letras: La primera letra determina el tipo de combustible del motor para el que fue diseñado el aceite, utilizándose una "S" para motores a gasolina y una "C" para motores diesel.

La segunda letra determina la calidad del aceite donde mayor es la letra (en el alfabeto) mejor es la calidad del aceite. Actualmente en motores a gasolina se utilizan los clasificación SJ mientras que en motores diesel los CH.

Los aceites de mayor calidad o más recientes como el SJ pueden ser utilizados en vehículos viejos con especificaciones de aceite inferiores, pero por ningún motivo se deberá utilizar una aceite de calidad inferior al especificado por el fabricante del motor.

Clasificación por su grado de viscosidad
La Sociedad de Ingenieros Automotrices (SAE) también clasifica los aceites según su grado de viscosidad. La viscosidad es la resistencia que ofrece un líquido (o gas) a fluir y depende enormemente de la temperatura. En esta clasificación los números bajos indican baja viscosidad de aceite o bien aceites "delgados" como comúnmente se les conoce y número altos indican lo opuesto.

En cuanto a grado de viscosidad se refiere, existen 2 tipos de aceites:

Monogrados: Diseñados para trabajar a una temperatura específica o en un rango muy cerrado de temperatura. En el mercado se pueden encontrar aceites monogrado SAE 10, SAE 30, SAE 40, entre otros.

Multigrados: Diseñados para trabajar en un rango más amplio de temperaturas, en donde a bajas temperaturas se comportan como un monogrado de baja viscosidad (SAE 10 por ejemplo) y como un monogrado de alta viscosidad a altas temperaturas (SAE 40 por ejemplo)

Los aceites multigrados están formados por una aceite base de baja viscosidad así como de aditivos (polímeros) que evitan que el aceite pierda viscosidad al calentarse.

Esto permite a los aceites multigrados trabajar en un rango muy amplio de temperatura manteniendo las propiedades necesarias para proteger el motor. En el mercado podemos encontrar aceites multigrado SAE 5W-30, SAE 15W-40, SAE 20W-50, entre otros.

Aquellos aceites que cumplen los requerimientos de viscosidad a bajas temperaturas (bajo 0°C) se les designa con la letra "W" que indica invierno (Winter).

Clasificación en cuanto a su naturaleza
Convencional o Minerales: Aceites obtenidos de la destilación del petróleo. Estos aceites están formados por diversos compuestos de diferente composición química que dependen del proceso de refinación así como del petróleo crudo utilizado.

Sintéticos: Aceites preparados en laboratorio a partir de compuestos de bajo peso molecular para obtener compuestos de alto peso molecular con propiedades predecibles. Estos aceites tienen algunas ventajas sobre los aceites convencionales, a continuación algunas de ellas:

Mejor estabilidad térmica. Los aceites sintéticos soportan mayores temperaturas sin degradarse ni oxidarse, esto es especialmente útil para motores que se operan en ciudades con altas temperaturas y motores turbo-cargados. Esta estabilidad térmica también permite mantener más limpio el motor.

Fuente:  
http://www.guioteca.com/
http://www.tuningnoticias.com.ar/
http://tuning.deautomoviles.com.ar/ 

http://www.blogicars.com/  
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